Versos a Héctor

 Versos a Héctor

Recrearme en tu movimiento

Agazapado ante el manzano 

Reduce el resto de cosas a menos

Las saca de plano 

Y en primero aparece 

Tu silueta centelleante 

Abrazada por las flores

Y me acerco a tus ojos 

Olvidando los miedos 

Apretando las palabras contenidas 

En sonidos inteligibles 

Que pretenden exteriorizar 

Lo que hace 

Tu piel al roce con la mía

Y entonces te beso 

Y en ese preciso momento

La arena del reloj se derrama

Nos regala algo eterno

El no tiempo

Volver al centro 

Al instante perfecto

A vernos por dentro 

Puros e imperfectos

Nos regala, también

Estos versos 

En pago por tanto se queda

Sin embargo

Con el resto de poemas

Los recauda como tributo 

A cuenta de las veces que te miro 

Y sólo te miro

Así, tan vivo

Con tus ojos veraces 

Con tu sutil movimiento 

Agazapado ante el manzano

Siendo tú mismo el propio verso

De carne y hueso

Y yo desarmada de poesía ante tu aliento

Sólo te miro 

Y te beso.

Lunes alegre de casi invierno

Estamos a finales de noviembre y el sol abraza la calle a la hora del desayuno. Como reflejo de una vida plena y sencilla, el té y el café se toman en la puerta de casa; la vecina encuentra algo que tender y aclara su primera voz con nosotros. Es lunes y no tenemos prisa. No hay coches y los gatos ya conocen la rutina de Khoa. Saludas a la albahaca, bailas la tostada. Observo la imagen anonadada por la fortuna que me envuelve y susurro un gracias. Lo repito en voz alta, sonríes. Sucede el día como el resto, en el orden y en el ritmo natural desestablecido. Rompemos todos los planes y el resultado se torna grandioso. Entre dicha y agradecimiento comenzamos a pintar un cuadro rebosante de colores selva en el que nos refugiamos y al que llamo edén. En el boceto del mismo coloco tres grandes círculos suspensivos que me llevan hasta tu cuello, y allí establezco mi nuevo universo favorito, en el que planto un beso de raíz para que te dure, por lo menos, hasta el siguiente.

Correo postal

 Tengo un poema atrapado dentro de un beso que viaja decidido hacia tu boca y en la mía las palabras atascadas por ser estás pequeñas ante tanta magnitud. 

Tengo un abrazo preparado dentro de mis ojos con la dirección postal de los tuyos escrita a fuego y una hoguera creciente en mi pecho de madera dorada de roble.

Tengo un montón de cosas que decirte con las manos y todas las ganas de bebernos a pequeños tragos.

Tengo un te quiero flotando en mi poleo menta que reclama llegar a tí.

La danza del ahora dichoso

Baila

Danza 

Como si el mundo 

Ya se hubiera acabado 

Pero la música siguiera 

Sonando en tu cabeza

Agarrame de la mano 

Sudemos lo que nos sobra 

Ponle canciones a tus palabras

En lo que yo trato 

De hacer poema el sentimiento

Seamos la energía que tenemos

Ni más, ni menos

Contempla anonadado 

La suerte a raudales

Del que la aprovecha sin miedo

Agarrame mientras volamos

Tengo algo que enseñarte

Se paz y se ciencia

No tengo prisa

Dedicate en plenitud a ser

Juntemos la piel 

Que gime al magnetismo 

Mientras busco los versos 

Que no me atrevo a escribir 

Goza

Simplifica

Que yo estoy completa 

Pero bruja aún 

Desbordante de agua 

Encendida en presente 

Y curiosa de ti.

De ser por placer

Acercarse a una rotonda

Y parar en medio

Dibujar dos pasos y un salto

Al vacío indescriptible del momento

Encontrar en la cuneta

Varios miedos

Y alguna duda

Chequear las coderas y el casco

Tocar un moratón que aún duele

Parar el tiempo con una tela

Y salir antes de todo

Ser viento fuerte que vuela

Y arena cálida

Convertirse en carretera que avanza arriba 

y en almohada

En la música del inconsciente

Que resuena en el silencio de los ojos

En mensaje

Seguir danzando cuando todo para

Encontrar luz y risa en Orión 

En otras constelaciones también

Y en otras galaxias

Beber vino de cosecha ajena

Decidirme alas y cielo

agua caliente que cura 

Movimiento terco e inconstante 

Seguir mi camino por verme

Capaz de abrir un hueco en la pared 

Y sacar la cabeza para mirar las estrellas

Memorizar el camino

Romper el mapa

Seguir con este viaje a la fuente

Y sumergirme en alegría

Lavarme las heridas con verano

Y cumplir daños

Con la entrega del que vive por placer

Justificación de muestra nºZ

Como un jeroglífico en la pared

detrás de la pintura desconchada

Como un sentimiento 

escondido dentro de un color

Como la palabra que entiendes

pero no alcanzas 

Como saber de memoria lo que viene 

desde el hipocampo de un pretérito

Como romantizar el tiempo

y luego darle poder al presente

Como jactarse del vacío y caminarlo

Como no entender el laberinto, 

como quererlo y no.

Como quitarle los pesos a la balanza

y lanzarla a los leones 

para tallar una nueva por la mañana 

Como querer quemarlo todo 

en una hoguera de San Juan 

Como destilar mis horas 

en versos aleatorios 

Como discernir con claridad 

mientras ocurre 

Como abrazar las tinieblas con compasión 

Como la cabeza saliendo del volcán 

para respirar 

y su estallido controlado

Como una exhalación de bruma 

que guardar en el cajón 

-y todo lo que entierro-

Como la alfombra que sufrió daños colaterales 

por no ser un arcoiris 

Como lo que parece y lo que es 

Como el cocktail bien agitado 

de todo lo dicho 

y lo demás

Cuando escribo...

es como...

Como si fuera yo de verdad 

pero fugaz.

Mi mundo fractal en armonía

Mi mundo fractal en armonía con sí mismo

Rescata aquella balada nocturna salvaje

De regusto veraniego

Y la juega en todos sus niveles.

En cada uno suena diferente

Pero, en esencia, es la misma melodía.

En cada silencio de barbecho

Toma unos retales para remendarme la intuición

Que guarda en el bolsillo izquierdo de mi cerebro

Le ofrece micro y ampli

Y me obliga a escucharla por las noches.

Mi mundo fractal en armonía con sí mismo

Actúa como ente independiente

Tiene su propia BSO y su idioma particular.

A las gafas, les llama perspectiva

Y a las alas, libertad;

Omniverso diplomado en observación

Que me viste de un intenso color a vida

Y que me abre la puerta al ulterior.

Reverbera la onda imperecedera y ácrona

Que, como un antiguo grabado antropocéntrico

Se emite desde mí hacia todas las direcciones.

Nos convertimos en lo mismo,

La música, el color, la intuición y las alas;

En lo que me envuelve

Y en lo que me compone.

Mi mundo hiperbólico y dimensional

En búsqueda continua de armonía consigo mismo 

Se presenta ante el resto sin ciencia.

Precisa tu quietud absoluta 

para escuchar sin mis ojos

Los salmos que acortan el viaje

Desde su cima hasta mis raíces;

Y te insta a creer en él.

Los algoritmos de mi realidad

Suenan a balada nocturna y salvaje

Saben a chai, huelen a fuego.

Mi mundo fractal en armonía

Soy yo en equilibrio

De mis listas del ser y otros placeres que contarte

Recitar poesía desde la cama 

Tender las sábanas en verano 

Ver el ropero ordenado 

El chocolate antes de acostarme 

Los masajes, así en general 

El sonido de la lluvia en la furgoneta 

El sol temprano 

Dormir hasta tarde 

Hacer música y ver hacer música 

Los escenarios en las terrazas 

Las señales del universo 

El té por acabar 

Como un tic de supervivencia 

Oír el silencio 

Roto por el canto de los pájaros 

ajenos a todo lo que soy 

El agua fría para el calor 

Mi querida estufa en esas noches 

Que me duela de reír 

Bailar en bragas 

Las buenas críticas 

Convertirme en ermitaña de vez en cuando 

Escribir para reconocerme cinética 

Cambiar aunque solo sea 

para que broten nuevos poemas 

Las ventanas sin cortinas 

La gente bonita como regalo 

Los autoregalos 

La suerte a raudales que agita mis alas 

El fuego

Los juegos 

El arte que hay detrás de lo más simple 

Ese rayo de sol 

que la nube convierte en magia 

Tener agujetas por tres días 

Acordarme de los sueños y contarlos 

antes si quiera de abir los ojos 

Los reposos sin manos 

Los triángulos, los círculos, la sincronicidad 

La verdad 

Correr muy rápido porque sí

Las manos, así en particular 

El paso del viento 

Respirarle a la tormenta que nos cubre

El beso del tiempo 

El poder de este poema para ser eterno 

Todo lo que aún callo

Y tanto del resto 

  

 

Marionetas de primavera intensa

Candente exclamación de abril

Borboteas mi epidermis con tu luna

Las baquetas marcan el ritmo sagrado

Del ineludible viento metal

Y relincha alada y dichosa la noche

Que mojada pretende dormirnos

Sólo veo el siguiente paso

Sencillo movimiento de reina roja

Ganando el espacio del tempus fugit 

Del subconsciente que decide antes

Del diferente modus operandi

Y la cautela toma ventaja 

Claro resultado de memorias descubiertas 

El arte de la prudencia retorna desde el sur

Para usarlo de nuevo 

Posponiendo todo que no sea 

Dejándome ser 

Presenciando la luz y la paz

Y todas sus ciencias y su discurso perspicaz

Y con todo y sin nada

Inevitablemente la rueda gira desbocada

Hacia el aprendizaje voraz de la vida humana

Desnuda, liviana

La runa que saco recae en mis pies

Y escribe en el techo de mi cueva 

Lo que solo en el silencio se proclama

Convierte la esencia en palabra

La reacción química en sonido ancestral

La decisión en hilo movido por algo más sabio

Residente perenne de la consciencia superior 

Que marca cada uno de mis pasos

Echo el cuerpo al nado 

Mientras la carne de mis labios cree decidir cantarle a la incomprensión

Me quedo un bocado de tiempo para sobrevivir

Para aprender la lección

Y sin poder si quiera elegir

Si parar el poema o seguir

Me conviertes en verbo irracional

En dolor en maxilar, en espejo,  

en despertar...

En mar.

De cuando me pierdo para ver

Ya no encuentro poesía entre mis charcos

Solo agua que recoger

Sin embargo me siento verso de paso

Rey instinto llévame 

Dudo si después de mi habrá otra estrofa 

O cenizas de papel

Si la energía sin forma que se queda en mi boca 

Tiene el regusto de ayer

O es la piel

Que prefiere guardar cada nota 

En el subsuelo de mi ser

Llueve y se moja mi ropa

Trato de salvarme los pies 

Bajo la cara y veo en mis medias rotas

Los poemas que seré

Entonces encuentro herramientas

Entre el caos que yo creé 

Enciendo algunas a oscuras, a tientas 

Me dispongo a comprender 

La razón de tu aparecer 

Y de mí sale un chorro de estrellas 

De cada herida

Brota crecer y poder

Y dolorida,

solo interrumpida por el sonido 

de la lluvia que no cesa, 

elijo creer. 

Aventura en el barranco

 

Perder el sentido

Tomar el control

Dormir al abismo

Guardar mi calor

Rozar las estrellas

Sentirme mejor

Caer en la cuenta

Del eco mayor

Cambiar en retiro

Oler mi canción

Subir por la cuerda

Palpar el telón

Oscuro y eterno

Libera tu olor

Mi carne oxidada

Y el huerto sin dios

Graznidos alegres

Al son de mi pecho

Mientras a la graja

Le hacemos de techo

Anclada mi espalda

La sombra un tambor

Marcando mi ritmo

Esquivo quien soy

Inquina la herida

Que ejerce presión

Para las manillas

Del tiempo sin voz

Las reglas del juego

Las letras escritas

Los frenos las prisas

Las vidas sin vida

La fuga continua 

Lleva a mi interior

Me sueño dormida

Y aullo al color

Contar con la boca

Hablar con los dedos

Sentirme tan poca

Tan toda y que quiero

  

Contar con la boca  

Llamar a mis miedos

Creerme tan rota

Y tan diosa, que puedo. 

 

Salto cuántico al nuevo año

Fugaz

Me vuelvo efímera saliva 

De mi universo entero y deconstruido

Del fuego, haz 

Mi mano en llamas prende lenta

Y el sudor se convierte en grito

Y todo, y más 

La pureza se torna esencia

Imprescindible y honesta 

Vástaga de mi, lava, cascada

Y la nada 

Que responde a privilegio

Corriendo detrás 

La letra que llena el espacio

El diálogo dérmico 

Preparando el folio de blanco

Cantando bajito

Velando la paz 

Empezando 

Sin más 

Nueva yo

que aúna en esencia lo sido 

Lo ganado, lo aprehendido

Me recibo en mi retiro

Plena, feliz, completa conmigo

Convierto lo banal en ritual

La intención lleva el sombrero 

Y se unifica lo dual 

Soy fuego y soy mar 

Raíz, tierra, también mi viento

Las mil tres plumas de mis dos alas

Nocturnidad y libertad 

Y soy fugaz

Me vuelvo efímera en mi herida

De mi universo perfecto y desvestido

La luz, el fuego, y el haz 

Mis pies en brasas a voluntad

Y el dolor se convierte en fuerza

En poesía, en fruta madura que cae 

Lo puro se queda en mí

Y todo

Y más. 

Solsticio de invierno

Solsticio de invierno

Sal en la piel

Aire en los pasillos

Renovación

Noche eterna de sueños 

Luz tenue

Recogimiento de energía 

Saneamiento del ser

Diástole anual preparatoria

Viaje adentro, al centro

Genuina estación cinética

Invierno de mí

Todo preparado de blanco

Desintoxicación de color

Aroma a nuevo

Agradecimientos infinitos

Magia, frío y fuego

Espejos convertidos en puerta

La inversa propuesta

En mi sabiduría la llave

Yo sempiterna aprendiz 

Mapas escondidos en canciones

Música, vehículo público

Cascabeles en los bolsillos

Casa, victoria, calma

Los libros esperando

Biblioteca etérea del todo

Y un nuevo ciclo de abundancia

Amor que reboso para mí

Claridad

Y ante mis ojos, el océano

Tuve que cruzar el río 

No me dejaste muchas más opciones

Me mojé hasta el ombligo con esa gélida corriente imparable 

Que parecía pretender limpiar tu huella de mi piel 

Se me petrificó el cuerpo y volví a convertirme en roca 

En ese instante el agua me rodeó generando una cascada tan feroz que hasta a la roca le dolía

Rasqué las lascas que se desprendían de aquella coraza y pulí durante un tiempo un escudo más confortable 

Una vez adaptado este a mi segundo cuerpo continúe hasta la otra orilla 

Pensé que la odisea terminaría pronto, al atisbar un camino ascendente y empedrado que conducía a lo alto de la montaña

Subirlo, alcanzar la cima, sería lo que me quedaría para borrar las ganas de besar tu iris con mi pupila 

Pero he llegado arriba, y no hay botón de formateo, hace frío, y mi ropa aún no se ha secado. 

Delante de mí se abre inmenso y descomunal un océano. Desprenderse de la humedad va a ser un poco más difícil de lo que esperaba.

Es hermoso, pero el miedo me susurra que quizás no pueda cruzarlo. Lo callo, es el miedo.

Tengo que hacerlo. Voy a cruzarlo. No me he dado muchas más opciones.  

Está lleno de colores cambiantes, de verde paradisiaco, de gris azulado, de galaxia lejana, de marrón preotoñal... Y cargado de mareas bravas que lo inundan todo crónicamente 

Atónita ante él, aunque sabiéndome capaz pienso:

"Como si tuviera que cruzar tus ojos sin barco, sin poder nadar y llegar al otro lado, donde ya no importa si no estás...

Así me encuentro."

El de una espiral ascendente, vida y presente.

El círculo eterno 

es más bien una espiral ascendente

fantásticamente diseñada 

para vivir en una sucesión de fases.

-A lo que me digo-

Decide como transitarla.

A saltos rítmicos y danzantes 

o arrastrado por la inercia 

del que busca fuera

lo que ya es.

O quizás, y con suerte,

flotando en la dirección consciente

del que sabe a dónde va,

que no puede ser otro lugar 

sino El Presente;

cíclico, 

cinético sin remedio,

fugaz y perenne.

Ese mismo presente,

que deja de serlo al mirarlo,

gobierna las emociones y el aprendizaje.

Hace a todo un Uno múltiple

para desintegrarse al instante

y repetir el proceso

hasta el siguiente.

Te permite saber hoy

y olvidar luego.

Recordarlo todo otra vez 

en la entrada noche,

equivocarte y acertar, 

sentir dolor, excitación,

curarte de cualquier condena

-Ya que el paso de la sentencia

es inminente, inevitable-

Te permite confiar en la muerte 

de cada segundo que vuela

que se transforma

y ser vida.

Canalización animal

Me acuesto mitad corazón mitad mariposa

Sueño que me olvido de todo

Solo por si no apareces

Y despierto con ambas posibilidades

Dentro de una caja de mudanza

Me levanto y me deshago 

de una mosca que me ronda 

Siento entonces el presente

Derrumbando todo lo demás a su paso

Los mundos sutiles que me rodean

Están esperando mi raíz 

Y en mi terapia de poder 

Los animales escuchan mis pensamientos

Y el león cambia de tamaño 

Al antojo de mi esencia 

Bajo el dominio de mi energía se halla el resto de mí

Que no desaparece

Pero tampoco manda

De las estaciones del ser y mis climas.

He movido mi caparazón a la sombra 

Ahora llueve afuera 

Dentro tengo todo lo que necesito

Sobrevivo

He creado una burbuja de reflexión 

Nadie puede entrar ya

Yo puedo escupir lo que me sobra

Pero dentro ya está lleno

Y sólo quepo yo 

-Y todas las que no son yo, pero que escucho-

Con nimia diferencia

Imitan mi voz a la perfección

A veces no me distingo

He deseado que lloviera

He soñado con este viento

Que ahora azota mi toldo agujereado

Me descubro incapaz de rechazar 

Lo que le pedí al universo con ahínco

Vivo, truena y aprendo

He reciclado palabras que ya me dije

Y ahora escribo los textos que me servirán de refuerzo 

Los que soportarán mis siguientes alientos

Me tiemblo fuerte

Soy una soñadora

Es algo que tengo claro

Nada puede evitarme vivir allí

En ese mundo intangible puedo volar

Y caer, y llorar, y morir, y nacer cuántas veces sea necesario.

He decidido soñar con mi verde

Soy primavera constante 

En equilibrio con otoño eterno

Nací en agosto la primera vez

En verano todas las demás.

El ahora y el amor.

El ahora 

Es para siempre

Brutal y concluyente

Inmarescible y eterno

No puede ser borrado del archivo

Es tangible 

Es casi lo único real 

Es perfecto en la dicha

Voraz en la abundancia

Nuestro

El ahora 

Es resultado y causa

Aprendizaje y experimento

Es vida

El amor 

Es axioma irrefutable

Paciencia y oscuridad

Frecuencia

Y tansferencia 

Es intercambio de pieles

Y metáfora en sí mismo 

Es adaptación 

El amor

Es la fuerza que lleva 

al equilibrio del que ama

Hasta el ahora

De sentirse bien y ser.

 Me sienta bien quitarme la mochila

Cortarme solo el pelo que me apetece 

Dormir sola

No saber en qué día de la semana estoy

Pero ser consciente del estado de la luna y de mis ciclos 

Me sienta bien sentirme observadora de mí misma

Y del resto

Del espejo

Tocar la tierra con las manos 

Ir descalza por la senda 

Forzar mi cuerpo para deleitarme de un paisaje

Y la música 

En la música me siento esencia

Veo las respuestas a preguntas que no se formular 

Esas que también se te revelan en los sueños

Me sienta bien descubrirme en lo onírico

Experimentar un sentido nuevo y más profundo del amor

Estar presente

Escribirte 

Enredos de medianoche en tu recuerdo

Tu voz se acerca

Muerden mis dientes tu cuello cansado

Ansiosos de algo

Te seco el pelo con las manos

Remueves el vaso

Te bebo 

Me sientes temperatura distinta en tu cuerpo

Sudas

Me mudo

Se desnuda la habitación entera para observarnos

Nos duerme juntos

Me despierto a tu hora

Mi boca te busca

Mis ojos siguen aquí

En el sueño que tengo de verte

Las sábanas esperan arrugadas tu retorno

Y la tierra vuelve a dar la vuelta

Queriendo que las manos que me busquen sean las tuyas 

Me respiro y me veo

Cerca, muy cerca

Aunque aún lejos..